Dentro del desarrollo empresarial, la existencia de conflictos es un riesgo latente, que debe prevenirse mediante un blindaje jurídico adecuado. Es por ello que se vuelve imperativo que en caso de conflictos administrativos, las empresas cuenten con un óptimo respaldo técnico y legal para su defensa; para asegurar una adecuada defensa de los intereses del cliente.

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Hoy en día el Derecho Administrativo, no sólo lo aplican las empresas, también lo deben aplicar las personas naturales que acuden ante cualquier organismo gubernamental con requerimientos propios de su actividad, e inclusive por parte de aquellos funcionarios públicos que, por su actividad inherente, han sido objeto de glosas por parte de la Contraloría General del Estado.